La fiscalía italiana detuvo a ocho paquistaníes y un afgano que planificaron un ataque suicida. La célula tenía contacto directo con Osama bin Laden, hasta su muerte en 2011
La Fiscalía de Cagliari (en la isla italiana de Cerdeña), que ha conducido las investigaciones para desmantelar una red en Italia de la organización terrorista Al Qaeda, explicó que en sus pesquisas encontraron «señales de la preparación de un posible atentado en el Vaticano en 2010″.
Según el fiscal Mauro Mura, de las interceptaciones durante los años que duró la investigación surgió la hipótesis de un proyecto de atentado durante la permanencia en Italia de un presunto kamikaze de origen paquistaní.
Mura subrayó ante la prensa que no había nada previsto sino que sólo se hablaba de una hipótesis de atentado.
Estas revelaciones surgieron durante las pesquisas que iniciaron en 2009 para fortalecer la seguridad en vista de la celebración de la cumbre del G8 en la localidad sarda de La Maddalena.
Los fiscales comunicaron que en relación con las 20 órdenes de detención emitidas se ha podido arrestar finalmente a nueve personas, ocho paquistaníes y un afgano, mientras otros tres están desaparecidos y el resto abandonaron ya Italia.
Las detenciones se han producido en las ciudades de Sassari, Bérgamo, Macerata, Roma, Frosinone y Foggia, y a los arrestados se les acusa de actos terroristas en el extranjero y de favorecer la inmigración clandestina.
Esta red estaría implicada en algunos atentados terroristas, como uno en Peshawar (Pakistán) en 2009 en el que murió un centenar de personas.
La Fiscalía confirmó que de las interceptaciones telefónicas se deriva que las familias de dos de los paquistaníes arrestados tenían contacto directo con el líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden,asesinado en mayo de 2011.
En estos años de investigaciones también se ha podido constatar que la organización tenía a su disposición armas y que reclutaba a personas para enviarlas a cometer actos terroristas en Pakistán y Afganistán, y que después regresaban a Italia, añade la nota oficial.
Los investigadores señalan a un imán de Bérgamo (norte de Italia) del que aún no se ha facilitado el nombre, como el principal responsable de fomentar la recogida de fondos en algunas ciudades entre las comunidades paquistaníes y afganas, que eran después enviados a estos países para cometer atentados.
En un comunicado de la Policía italiana se cita cómo en una ocasión la organización hizo llegar55.268 euros a Islamabad mediante un emisario en un vuelo desde Roma, aunque normalmente usaban el método conocido como ‘hawala’, que funciona utilizando una red de colaboradores y familiares.