El matrimonio estaba durmiendo en su dormitorio cuando los malivivientes los despertaron y amenazándolos con armas de fuego los obligaron a arrodillarse en un pasillo donde les gritaban y exigian que les entregaran «el dinero» de la venta de una propiedad, los malvivientes revisaron toda la finca y se alzaron con $22.000 en efectivo. Ademas retiraron de su habitación al hijo del matrimonio al cual también hicieron arrodillar y lo golpearon en la boca.
Tomo intervención la UFI 5, quien caratulo la causa como «Robo Calificado»