Ni bien se tomó conocimiento de la fuga de este peligroso adolescente, personal de la Dirección Departamental de Investigación a cargo del subdirector Fabián Ferrari y el jefe de Operaciones, Luciano Capobianco, montó un amplio operativo en la zona oeste de la ciudad, realizando tareas encubiertas en la zona donde podría ocultarse el menor.
Durante varias horas, efectivos de civil y en móviles no identificables se apostaron en distintos puntos de los barrios Martín Güemes y 12 de Octubre y observaron al joven ingresar a la vivienda de un sujeto conocido suyo. Una vez que lo identificaron, los efectivos se apostaron en las inmediaciones del domicilio hasta que el adolescente salió del mismo para dirigirse a su casa.
Sin embargo, cuando salió a la calle el chico advirtió la presencia policial e intentó escapar ingresando a su vivienda ubicada en inmediaciones de Bombero Esquivel y Pacheco, donde tomó de rehén de su abuela apretándola del cuello. Pero los efectivos lo convencieron para que depusiera su actitud y finalmente el menor se entregó.
El chico fue puesto nuevamente a disposición de la Justicia y quedó en una alcaidía juvenil.