La madre de la niña permanecía internada en el Hospital Luis Lagomaggiore, bajo custodia policial, mientras era curada de heridas que se habría infligido.
El caso se conoció anoche, cuando la joven, llamada Valentina, llegó al hospital alrededor de las 23:00, con la pequeña en gravísimo estado.
Los médicos de guardia del Lagomaggiore se sorprendieron al ver que la joven permanecía unida por el cordón umbilical a la beba y que la pequeña, inclusive, tenía restos de placenta.
La neonatóloga de guardia, Mariana Torres, diagnosticó que la beba había nacido recientemente y presentaba «heridas punzo cortantes en el tórax, cuello y sangrado de uno de los oídos».
De inmediato trasladaron a la niña al hospital de niños Humberto Notti, donde falleció horas más tarde, mientras que la madre quedó internada en el segundo piso del Lagomaggiore con consigna policial.
Por orden judicial, efectivos de la Unidad Investigativa de la Policía local allanarom la vivienda de la joven, ubicada en Jorge A. Calle al 700, de la Sexta Sección, con el fin de hallar el objeto utilizado para cometer el crimen.
Los médicos del hospital confirmaron que la beba tenía 39 semanas de gestación y que siendo 01:30 de hoy había fallecido. Fue la doctora María Moyano, del Notti, quien confirmó el deceso.
Además, la profesional junto a los peritos de Policía Científica establecieron que la niña también presentaba «doble fractura de cráneo».
La causa quedó en manos de la fiscal especial Claudia Ríos, quien caratuló el expediente como «homicidio agravado por el vínculo», debido a que la beba nació viva y por lo tanto no fue producto de un aborto.