El empresario Mariano Martínez Rojas y otras diez personas fueronimputados por una fiscal porteña de los delitos de usurpación y daños, por lo que el próximo miércoles deberían prestar declaración tras losdestrozos ocasionados en la redacción del diario Tiempo Argentino.
Durante una conferencia de prensa, los trabajadores del diario habían criticado a Andrade y señalaron que por orden de la fiscal los agresores habían sido «custodiados» por la Policía Federal en momentos en que, según dijeron, cometían delitos de manera «flagrante» en el edificio de Tiempo Argentino.
A su vez, fuentes judiciales señalaron que la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N° 6, a cargo de Andrade, tomó conocimiento de que Martínez Rojas con «otros 10 hombres entraron a la fuerza» en el domicilio del periódico, ubicado en Amenabar 23, en la ciudad de Buenos Aires.
Relataron que «el grupo de personas comandado por Martínez Rojas obligaron por la fuerza a retirarse del lugar a las personas de seguridad del diario» y que «los dos agentes de seguridad de Tiempo Argentino fueron a la comisaría 31 a realizar la denuncia de lo que había sucedido».
Según la versión judicial, «la comisaría 31 dio rápida intervención a la fiscal Andrade», que «ordenó inmediatamente consigna policial en el diario Tiempo Argentino para asegurar el lugar«.
«A las 3:00 de la mañana, cuando algunos periodistas de Tiempo Argentino comenzaron a llegar al diario, se encontraron con Martínez Rojas y su grupo. Allí se produjo un altercado. La fiscal Andrade ordenó a la policía a que desalojaran del diario a Martínez Rojas y a su grupo», señalaron las fuentes consultadas.
Luego Andrade imputó a Martínez Rojas y diez personas más por los delitos de usurpación y daños y los llamó a declarar en 48 horas en la sede de su Fiscalía por los delitos imputados.
Los trabajadores de Tiempo Argentino habían denunciado que los agresores eran al menos dieciséis y que otras personas «escaparon por los techos».
En el parte de la Policía Federal, se indicó que los móviles de esa fuerza llegaron al lugar a las 0.40.
Los efectivos «se entrevistaron» con Martínez Rojas, a quien señalaron como «propietario de la empresa explotadora» en el interior del edificio de Amenábar 23.
Según la Policía, Martínez Rojas «se hallaba en el interior con otras personas y había hecho salir a tres trabajadores».
También indicaron que la fiscal Andrade «dispuso implantar consigna en el lugar y no permitir el ingreso de personal alguno y en caso de egresar alguno de las personas sea identificada sin adoptar otra temperamento».
«A partir de ello comenzaron a llegar al lugar trabajadores del diario y la radio en un número aproximado de cien, quienes preocupados por la pérdida de su fuente laboral comenzaron a intentar forzar las puertas de ingreso superando en número al personal puesto de consigna en el lugar para ingresar por el portón de ingreso a la radio», consignó la Policía.
En ese momento, la Policía realizó «una nueva consulta con la fiscal», quien planteó «continuar con las negociaciones a fin de lograr el desalojo del lugar y la devolución del inmueble a los trabajadores, quienes tienen en la actualidad la posesión del edificio».
Según los efectivos, luego de «una larga negociación es que se puso en conocimiento a la fiscal quien dispuso la correcta identificación de los autores de la intrusión, notificación fehaciente para que se presente en la sede de la fiscalía dentro de las 48 horas».