LA FECHA 25 DE MAYO ES MUY CARA (AMADA) AL CORAZÓN DE LOS ARGENTINOS, PERO DESPUÉS DE 207 AÑOS TODAVÍA NO TERMINAMOS DE DEFINIR PATRIA
Siempre tuve una curiosa observación sobre los argentinos y el patriotismo, viendo spots oficiales de otros países y hasta en films extranjeros, siempre se ve recalcado un fervor por sus símbolos y su patria que hasta produce una cierta conmoción en los que los observamos, podríamos pensar que es lo que nos quieren vender desde el extranjero para que creamos un patriotismo que en verdad no es tal.
Pero si esto fuera así, por lo menos reconozco que es un intento bastante bien logrado de mostrarnos un amor por su tierra y su historia que tiene buena llegada.
Lo curioso, es que en nuestro cine, salvo algunas películas históricas de esas que nos hacían ver en la escuela primaria y secundaria como material para realizar posteriormente algún trabajo práctico de Historia, donde teníamos que relatar lo que vimos y estudiarlo para aprobar algún examen, retomo, lo curioso es que en nuestras películas se apunta poco y casi nada al patriotismo argentino, un termino que suena antiguo arcaico, casi sin sentido, y si se menciona esta siempre entrelazado a un tema político partidista, con una intención de inclinar los pensamientos y la opinión hacia un movimiento en particular, ensalzamiento o detrimento de personas o hechos que lejos de ser objetivos, son sugerentemente imposición de pensamiento hacia uno u otro sentido.
Dejando esto aparte, mi observación se basa en el sentimiento patrio del hombre y la mujer común que vive en esta tierra, que trabaja, se educa, cría hijos y tiene un lazo con su terruño, que no tiene que ver nada más ni nada menos, que con el apego a lo que ama porque siente que le pertenece y que a su vez es pertenecido por una tierra donde le tocó nacer y que no cree que haya sido por azar.
Esa ausencia de este patriotismo poco plasmado en el cine o en los ya mencionados spots publicitario, en los que se percibe una segunda intencionalidad, es lo que a veces me causa escozor.
Pareciera que a los argentinos nos avergonzara mostrar un sentimiento por el país y los símbolos que se han mantenido a los largo de estos siglos.
Durante años he asistido a muchos festejos en fechas como las de hoy, y si no fuera porque se ponen audios grabados del Himno Nacional, casi ni se escucharían las voces de los padres entonando la canción que nos representa en el mundo.
Mas asombroso fue para mi, en los últimos años de ejercer la docencia, trabajando en un jardín de infantes, de La Matanza, donde asistían muchos hijos de extranjeros de nacionalidad boliviana en su mayoría, paraguayos o peruanos, que viven hace varios años en este país, que al momento de entonar el Himno Nacional Argentino, estos padres, tomaban una postura de sumo respeto y cantaban nuestro himno, con voz audible, mientras que la mayoría de los padres de los niños argentinos lo hacían tímidamente y a veces hasta con equivocaciones en la letra.
Muchos padres extranjeros, han adoptado esta tierra como propia, porque reconocen que les ha dado oportunidad, trabajo, hasta hijos nacidos aquí. PATRIA, no es sólo el lugar donde se nace, es aquel que sentimos propio, que defendemos cada día con nuestro esfuerzo, trabajo, amor.
Que arcaico suena todos esto, por eso no se transmite ni se enseña en los hogares.
Es que hay que entender, que el país, nuestro país, Argentina, no la hacen los gobiernos, ni los partidos políticos, que no nos pueden condicionar las buenas o malas decisiones de otros para amar nuestro lugar en el mundo, como titulaba una de las pocas películas que trata este tema.
En varias oportunidades a mi como a muchos se me ofreció la oportunidad de emigrar. Por un mejor futuro me decían, por más dinero, más comodidades, tal vez hasta lujos, y no quise hacerlo.
Viajar me gusta como a cualquiera, pero necesito volver, siento que en otro país no sería YO, este es el lugar que no sé porque razón Dios eligió que naciera, acá soy quien soy, la madre,la amiga, la abuela, la vecina, la profesora, de personas que me importan y a quien les importo, con quien compartí una historia.
Caminar por las calles de mi lugar, a veces de barrios desconocidos, pero reconociendo en la mirada de los otros mi identidad, su identidad, tal vez una sonrisa cómplice al ver algo curioso, maneras como nos comunicamos los argentinos, un Buenasss al entrar al almacén, un «che» que todavía se cuela en algún diálogo. Eso también soy yo, sos vos, somos todos los que vivimos acá.
Que hay cosas que no van bien, lo sabemos, que hay cosas que empeoraron, también, pero más allá de lo que sucede o de los engaños o de los que quieren hacer de nosotros un numero en un mercado, nosotros seguimos teniendo el poder de decisión de seguir siendo quienes somos.
Y no me avergüenza decir soy Argentina, porque yo no soy lo que otros mostraron, vos no lo sos, usted no lo es, porque cada mañana nos volvemos a levantar con la esperanza renovada, con el esfuerzo a flor de piel, calentando la leche a los pibes para que vayan a la escuela y soñando siempre soñando pero también trabajando para que ellos un día sean mejores que nosotros!
Grace Mesa
Redacción de Pergamino Verdad