El cadáver de Gonzalo Adrián Díaz (39) apareció ayer, alrededor de las 18, dentro de un pozo de 10 metros de profundidad en avanzado estado de putrefacción, en un campo situado al costado de un camino rural del mencionado distrito del norte bonaerense.
Fuentes policiales informaron que la víctima había desaparecido a fines de noviembre del año pasado y su concubina había radicado una denuncia por «averiguación de paradero».
Sin embargo, los investigadores comenzaron a sospechar del relato de la mujer y durante la última semana efectuaron algunos rastrillajes por algunos campos de la zona.
De esta manera, efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de San Nicolás encontraron el cadáver de Díaz en un aljibe cubierto por bolsas de residuos y plásticos.
En primera instancia los pesquisas establecieron que Díaz fue asesinado por ahorcamiento, aunque deberán aguardar el resultado de la autopsia que se realizará mañana.
De acuerdo a los voceros, el personal policial determinó que se trataba de la víctima a través de su contextura física, entre otros elementos.
Tras el hallazgo del cadáver, la DDI San Nicolás realizó un allanamiento de urgencia y detuvo a la pareja de Díaz, identificada como Mercedes de Lourdes Colazo (33).
Además, los efectivos detuvieron al amante de la mujer, llamado Armando Daniel González, y al hermano de ella, Ramón Heredia, agregaron las fuentes consultadas.
Según los voceros, Díaz era empleado de la empresa Siderar, había estado casado y se separó hasta que comenzó a salir con su actual concubina.
La causa fue caratulada «homicidio doblemente agravado» por la fiscal Franca Padulo, quien mañana le tomará declaración indagatoria a los tres aprehendidos.