Como especialistas, debemos abordar el cuidado de los labios de forma integral, considerando cada una de sus partes: comisuras, arrugas perilabiales, altura labial, proyección, hidratación, volumen, etc., así como también los surcos de marioneta y surcos nasogenianos. Hoy en día, existen tratamientos que ofrecen resultados 100% naturales.
Con los años se pierde volumen en el rostro, en general, y los labios, por su parte, comienzan a verse más y más finos. Se debe tener en cuenta que los labios carnosos están asociados a la juventud, de modo que esta disminución en su volumen representa para muchos un verdadero problema. Además, dado que la estética está muy influenciada por visiones estereotipadas, los labios voluminosos están de moda. Por ejemplo, Angelina Jolie, quien tiene unos labios carnosos ya famosísimos, es considerada una de las mujeres más hermosas del mundo.
En la actualidad hay rellenos muy nobles, suaves y de fácil colocación que pueden ayudarnos a mejorar el aspecto de los labios y, con ello, nuestra imagen en general, sin correr riesgos. Estos rellenos ofrecen, en manos experimentadas, resultados 100% naturales, sin efectos adversos.
Es importante aclarar que el aspecto de los labios, característica del sexo femenino que ha atraído desde siempre a los hombres, se relaciona con las particularidades de diferentes razas y culturas. Además, debemos saber que no tiene la misma anatomía el labio de un hombre que el labio de una mujer. De modo que los labios, atendiendo a estos condicionantes, deben tratarse de diferente manera, siempre respetando las proporciones faciales y el sexo. Por años, mujeres y hombres intentaron mejorar la definición de sus labios, su proyección y volumen, como así también eliminar arrugas peribucales, con diferente enfoque. Lo que debemos cuidar es hacerlo con responsabilidad y discernimiento, fuera de cualquier estereotipo y evaluando la seriedad de los tratamientos y de los profesionales que los ofrecen.
Cuando los labios tienen un volumen natural y bien definido, imparten una sensación de juventud y atractivo físico.
Labios envejecidos: ¿Qué observar?
Con el paso de los años, los labios se vuelven mucho menos atractivos por la pérdida de volumen: se ven delgados y planos y, muchas veces, con alargamiento del labio superior.
Al observar el labio envejecido, en líneas generales observamos:
– Que el apoyo de la dentición y la estructura ósea ha disminuido: el labio se ve menos proyectado.
– La distancia del labio superior a la nariz se encuentra alargada.
– Existen arrugas perilabiales en labio superior e inferior.
– La altura del labio rojo se ve disminuida, provocando un aspecto de labios finos.
– Las comisuras labiales están marcadas y deprimidas.
– Los surcos nasogenianos, a los laterales de los labios, están más marcados. Lo mismo sucede con surcos de marioneta.
SELFIES, REDES SOCIALES Y ESTÉTICA
Millones de personas a diario invaden el mundo virtual con selfies. Pero no todo queda ahí: es una práctica que algunos cirujanos plásticos asocian con un aumento de la demanda de cirugías estéticas en Estados Unidos, especialmente entre mujeres y jóvenes.
Una encuesta de la Academia Estadounidense, realizada entre 2.700 clínicas, mostró que una de cada tres había visto un aumento en los procedimientos debido a pacientes más atentos a su imagen por la influencia de los medios y redes sociales.
Señalaron un aumento de un 10% en las rinomodelación – en 2013, en comparación con 2012 -; un alza de un 7% en implante de cabello y un aumento de un 6% en procedimientos de párpados.
La sobre-exposición en las redes sociales incrementa los complejos de muchas adolescentes y, por lo tanto, el deseo de realizar el ansiado cambio de apariencia.
En algunos casos llega a desencadenarse un trastorno dismórfico corporal (TDC), también conocido como dismorfofobia: es un trastorno somatomorfo caracterizado por una preocupación importante y fuera de lo normal por algún defecto percibido en las características físicas (imagen corporal), ya sea real o imaginado. Si dicho defecto existe, la preocupación y ansiedad experimentada por estas personas es excesiva, ya que lo perciben de un modo exagerado.
El afectado puede quejarse por uno o varios defectos, por algunas características vagas, o por su aspecto en general (global), causando un malestar psicológico significativo que deteriora su desempeño social o laboral hasta el punto de manifestar síntomas ansioso-depresivos severos y el desarrollo de otros trastornos como ansiedad, aislamiento y exclusión social.
Un estudio alemán ha demostrado que el 1-2% de la población cumple todos los criterios diagnósticos del TDC, y que hay un porcentaje mayor que muestran síntomas leves de la enfermedad. La baja autoestima (crónica) es una característica intrínseca de las personas con TDC, ya que la valoración de su valía como personas está muy estrechamente vinculada con la percepción de su apariencia.
El TDC se diagnostica a hombres y mujeres por igual, y desencadena síntomas (o un verdadero cuadro) de ansiedad social para quienes lo padecen.
El trastorno provoca deterioro en la calidad de vida y suele darse comorbilidad con el trastorno depresivo mayor y la fobia social. Con una tasa de ideación suicida de alrededor del 80%, casos extremos de TDC pueden ser considerados factores de riesgo para el suicidio. Muchos casos de TDC son tratados con intervención psiquiátrica o psicológica. Una persona con este trastorno se puede tratar con psicoterapia, medicamentos o ambas modalidades.
DEBEMOS PRACTICAR EL AMOR HACIA NOSOTROS MISMOS Y UNA VALORACIÓN PERSONAL, NO SOCIAL, DE LA IMAGEN.
PODEMOS EMPRENDER TRATAMIENTOS SEGUROS EN BUSCA DE VERNOS MEJOR, PERO DEBEMOS HACERLO POTENCIANDO NUESTRA BELLEZA NATURAL Y SOBRE LA BASE DE UNA AUTOESTIMA FUERTE, NUNCA EN POS DE CUBRIR NECESIDADES DE ÍNDOLE PSICOLÓGICA NI MANDATOS SOCIALES.
Dra. Mariana Elizabeth Saez
Matrícula 64460
Medicina Estética Integral
Medicina Ortomolecular
Implante Capilar
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