Un hombre quedó detenido tras confesarle a su hijo que había asesinado a la mujer de 30 años. El hermano de la víctima denunció el caso.
Los restos de Ariana Yésica Palacios fueron encontrados este lunes enterrados en el jardín de su casa en Villa Tesei, partido de Hurlingham, después de que su padre confesara que la asesinó.
Willy, un empleado de una empresa funeraria, le confesó a su hijo que había asesinado a Ariana, de 30 años, tras una discusión en su casa. El hombre habría degollado a su hija el 28 de agosto pasado a las 11 de la mañana.
Fuentes policiales confirmaron que los restos de Ariana fueron ubicados este lunes al mediodía por un perro rastreador. Estaba enterrada en el jardín de la casa que compartía con sus padres y su hija, de 5 años.
El hombre ya está detenido.
Antes de este episodio nada hacía pensar que la mujer fuera víctima de violencia familiar, al margen de la relación tensa entre ella y su madre.
«Ella tenía adoración con su papá. Ella decía ‘es una masa, es lo más’«, relató Nadia, una amiga de Ariana, al canal C5N.
La joven había desaparecido el 28 de agosto pasado, pero su padre le había dicho a todos sus conocidos que se había ido de viaje a Gualeguaychú para «cambiar de aire» y alejarse de Adrián, su novio actual.
«Ellos lo pintaban como agresivo, por lo que me dijo Willy. Ella nunca me comentó nada«, relató la amiga de Ariana.
Por su parte Adrián le aseguró al canal Crónica TV que el padre de Ariana le «vino a plantear que ella ya no quería seguir la relación, que está estresada, que estaba mal, que decidió cambiar de aire, de trabajo».
«(Dijo) que yo no me preocupe y siga mi vida, que ella y su hija van a estar bien«, expresó el hombre.
Nadia le preguntó a Willy por Ariana reiteradas veces, ya que le resultaba extraño que la mujer dejara a su hija de cinco años en manos de sus padres por tanto tiempo. El hombre le dio una explicación aún más rara.
«El celular se le cayó al agua, se fue de viaje a repartir repuestos con una gente amiga que antes repartía», le dijo Willy a Nadia el 1° de septiembre pasado.
Ariana tenía dos trabajos además de su rol de madre. Uno de ellos era para una compañía de telefonía celular, por lo que su amiga se extrañó de que no «sacara un equipo nuevo» cuando se le cayó el suyo al agua.
Pero más extraño fue el mensaje de texto que recibió el 19 de septiembre de parte de Arianadesde un número de teléfono diferente al suyo.
Decía: «Qué tal, querida, yo viajando, entregando cosas. Novio conociéndonos. Mi teléfono se calló al agua. Saludos a todos«.
«Ari no escribe así», sentenció Nadia. «El mensaje no es de ella», corroboró Adrián.
El hombre contó que los padres de Ariana «se creían los padres de la nena» de cinco años, y que su novia «le tenía miedo a su madre», aunque nunca anticipó la confesión de Willy.
