Hasta el momento se mantienen siete hipótesis.
Afirman que el Boeing 737 de la compañía Ukraine International Airlines que se estrelló el miércoles en Teherán, causando la muerte de 176 personas, tuvo que dar media vuelta poco después de despegar debido a un problema técnico.
En la investigación trabajan 45 expertos ucranianos. Algunos, declararon que «el piloto no transmitió ningún mensaje de radio sobre circunstancias inusuales”. También, afirmaron que el vuelo PS752 salió del radar dos minutos después de despegar.
En el vuelo, viajaban 82 iraníes, 63 canadienses, 10 suecos, 4 afganos y 3 británicos. Otros 11 eran ucranianos, incluidos nueve tripulantes.
Según testigos presenciales, se observó un incendio en el avión que “se hacía cada vez más intenso». Sin embargo, todavía se desconoce el origen o la causa del fatal incendio.
Un comunicado de la Organización de la Aviación Civil (CAO) declara que «el avión que se dirigía al principio hacia al oeste para salir de la zona del aeropuerto, giró hacia la derecha debido a un problema y estaba en el camino de regreso al aeropuerto cuando se estrelló» cerca de la localidad de Chahriar, al oeste de la capital iraní.
Hasta el momento, los especialistas están barajando siete hipótesis, entre ellas la de un disparo de misil, la de un atentado o la de una falla técnica.
El presidente de Ucrania Volodímir Zelensky decretó una jornada de duelo nacional el jueves. Este, confirmó que Estados Unidos, Alemania y Francia participarán en el descifrado de las cajas fuertes.
Por sus partes, Estados Unidos y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau pidieron “una investigación exhaustiva” y “una plena cooperación en la investigación”.
Por su parte, el Presidente de los Estados Unidos declaró: «Fuentes de inteligencia creen que fue derribado por un misil de Irán por error mientras disparaba a objetivos norteamericanos»