El Taller Protegido de Pergamino, como tantas otras entidades de la misma índole y como muchos de nosotros, se encuentra enfrentando y padeciendo los embates del aislamiento social y de la cuarentena. No solo afrontan la cuestión de lo humano, que no es materia menor ya que un espacio como lo es el Taller constituye un lugar de pertenencia, socialización y contención para quienes acuden, sino también los problemas que devienen de la crisis económica y productiva.
Un Taller Protegido es una organización de la sociedad civil que cuenta con un emprendimiento productivo que nuclea a personas con discapacidad. La pandemia, obviamente, provocó que esos operarios tuvieran que dejar de asistir al taller, lo que incidió en sus ingresos, no solo familiares, sino en los de la misma institución, que, en consecuencia, hoy no tiene los recursos para afrontar sus obligaciones y necesidades institucionales. Tal como exponen los integrantes del Taller Protegido Pergamino: «Nuestros operarios están en sus casas cuidándose y cuidándonos ¡Cuando puedan volver, el Taller Protegido Pergamino tiene que seguir existiendo como hace 46 años! Acá está su trabajo, su vida, dignidad y felicidad. Con producción muy limitada, se dificulta el pago de sueldos y servicios.«
Por eso se unen a sus asociaciones hermanas del resto de la Provincia de Buenos Aires y piden:
La Federación de Talleres Protegidos (FETAP) ya planteó la situación actual de los Talleres al Director de Discapacidad. Pero se necesita también del apoyo de la ciudadanía para que se logre visibilizar este pedido. Debe quedar claro que, tal como la consigna en redes sociales lo afirma, «sin operarios no hay talleres» y que los trabajadores con discapacidad deben gozar de los mismos derechos y garantías que todos. No olvidemos que su trabajo, además, no solo nos provee de elementos y productos esenciales sino que su labor de reciclaje nos beneficia a todos, a la vez que nos educa en valores que debemos afianzar.
Ayudar a difundir esta información es contribuir, no solamente con las familias y personas que integran esta asociación; se trata de defender la justicia social y el bien común. La pandemia debe ser una oportunidad para instruirnos, una vez más, en qué derechos se priorizan y cuáles continúan como una deuda pendiente que es responsabilidad de todos, cada uno desde su lugar, ayudar a saldar.
Además de apoyar este pedido, se puede colaborar adquiriendo los productos que tienen a la venta y que algunos comercios y emprendimientos ofrecen, como lo hace ahora Cuarto Sello.
Por medio del siguiente enlace podés acceder al video institucional que explica su situación:
https://www.facebook.com/TallerProtegidoPergamino/videos/164718641449271/