Fernando Alonso volvió a nacer. Es que el piloto de McLaren fue protagonista de un accidente en el Gran Premio de Melbourne, en la Fórmula 1, que terminó con su auto destruido. El español chocó con el mexicano Esteban Gutiérrez y su auto salió volando y dio contra un muro de contención.

El choque fue tan violento que el público temió lo peor antes de que Alonso saliera de la cabina y se alejara con evidentes muestras de conmoción.

El piloto de McLaren dijo que le duelen un poco las rodillas, pero confirmó que esto no le impedirá correr en el siguiente GP.

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