21 noviembre, 2024

Alarmante-Los suicidios adolescentes casi se triplicaron en las últimas dos décadas

llorando
-El suicidio es la segunda causa de muerte más frecuente en la adolescencia argentina, con un 13% del total de defunciones (Ministerio de Salud y UNICEF -2016).
-El 16,9% de los adolescentes consideró la posibilidad de suicidarse (Encuesta Mundial de Salud Escolar – 2012).
-El suicidio se puede prevenir adoptando medidas eficaces como la restricción del acceso a los medios para cometerlo y la formación del personal sanitario. Para ello se requiere de una estrategia integral multisectorial de prevención.
-#InfanciaEnDeuda insta a priorizar la prevención del suicidio en la agenda de salud pública, en las políticas públicas y concientizar acerca del suicidio como una cuestión de salud pública.
 
La tasa de mortalidad adolescente por suicidios casi se triplicó en las últimas dos décadas, al pasar de 2,5 cada 100.000 habitantes durante el trienio 1990-1992 a 6,9 en el trienio 2013/2015, según datos del Ministerio de Salud. El suicidio puede prevenirse, pero para ello requiere ser entendido como una problemática de salud pública y, como tal, contar con políticas públicas que disminuyan los factores de riesgo. Las organizaciones de la sociedad civil que integran la causa #InfanciaEnDeuda alertan sobre esta situación e instan a instalar la problemática en la agenda de salud pública.
Según el informe La situación de la salud de las y los adolescentes en la Argentina, elaborado por el Ministerio de Salud y UNICEF, la mortalidad adolescente por lesiones no intencionales, habitualmente consignadas como accidentes, son la causa de muerte más frecuente en la adolescencia, ya que representan el 30% de las defunciones, seguidas por los suicidios con un 13 por ciento.
El documento de Unicef «Para cada adolescente, una oportunidad. Posicionamiento sobre adolescencia en el país», revela que en 2015 se registraron 438 casos de suicidio, de los cuales tres de cada cuatro correspondieron a varones. Ese mismo año, diez adolescentes murieron por día por causas evitables, entre ellas accidentes, suicidios o agresiones.
La Encuesta Mundial de Salud Escolar realizada en 2012 reveló que el 16,9% de los adolescentes había considerado la posibilidad de suicidarse ese año, registrándose también un incremento del 3,5% de los adolescentes que habían realizado un plan concreto de cómo suicidarse: pasó del 12,6% en 2007 al 16,1% en 2012.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las y los adolescentes poseen vulnerabilidades particulares, por su etapa del desarrollo, y tener ocasionalmente pensamientos suicidas es un proceso normal de desarrollo en la infancia y adolescencia al tratar de elucidar los problemas existenciales cuando se trata de comprender el sentido de la vida y la muerte.
El informe también explica que la mayoría de las personas que intenta suicidarse no busca exclusivamente la muerte. Se supone entonces que el suicida no quiere fallecer, sino que desea dejar de sufrir. Esta premisa se complementa con la idea de que los niños de entre 8 y 11 años no tienen noción de que la muerte es para siempre y muchos adolescentes tampoco. Por eso, pueden llegar a pensar que cuando estén muertos, las personas que los hicieron sufrir recapacitarán y dejarán de provocarles dolor cuando resuciten.
En cuanto a las y los adolescentes en riesgo de suicidio, Unicef señala que pueden sufrir vulnerabilidad psicológica o mental, provocada por distintos factores. Entre los más comunes están los problemas familiares graves como situaciones de violencia o agresividad; abuso sexual; los problemas en la escuela, tanto en relación con las bajas calificaciones como el rechazo por parte del grupo de compañeros que, en algunos casos, se convierte en bullying o acoso escolar a través de burlas y agresiones; las dificultades en torno de la identificación sexual y el temor a la reacción de la familia; y especialmente, los intentos previos de suicidio.
En ese sentido, resalta que uno de cada tres adolescentes entre los 12 y 14 años y uno de cada cuatro entre los 15 y 17 años sufre castigos físicos por parte de sus padres. Sumado a ello, una de cada diez víctimas de trata para explotación sexual o laboral es menor de 18 años.
Además, existen algunos síntomas a los que es importante prestar atención para la prevención del suicidio adolescente. Por ejemplo, el desgano y desinterés, la tristeza y la soledad que pueden estar asociados a una depresión. En otros casos, los adolescentes manifiestan la depresión a través de un alto grado de excitabilidad. Hay algunos otros más observables como los cambios en la forma de alimentarse (pérdida o aumento de apetito) o los trastornos en el sueño.
La OMS considera que, si bien no todos los suicidios se pueden prevenir, se puede reducir el riesgo. En este contexto, #InfanciaEnDeuda advierte que se debe dar visibilidad a la problemática y adoptar una estrategia integral multisectorial de prevención. Para ello, es fundamental priorizar la prevención del suicidio en la agenda de salud y crear políticas públicas. Formar a los profesionales de la atención primaria de salud para la detección temprana es fundamental para ayudar a prevenir el suicidio adolescente. 
Sobre #InfanciaenDeuda: es una causa que reúne a distintas organizaciones de la sociedad civil para llevar adelante una campaña de concientización para dar prioridad a los derechos de los niños en la agenda de políticas públicas. Está integrada, entre otras, por la Asociación civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC), el Colectivo de Derechos de Infancia y Adolescencia, la Asociación por los Derechos civiles (ADC), la Fundación Sur, Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer (FEIM), Haciendo Camino y Aldeas Infantiles. El principal objetivo es asegurar el cumplimiento de la Ley 26.061 -promulgada en 2005- que, además de crear el cargo del Defensor del Niño, incluye entre otros puntos la realización de una encuesta nacional nutricional que informe sobre la situación actual de la niñez; la implementación de una política coordinada e integral para cumplir con los derechos de la primera infancia, y la asignación del presupuesto necesario para garantizar las necesidades de niñas, niños y adolescentes de la Argentina.
Comentarios en Facebook

Deja una respuesta

error: Por favor no copie el contenido, compártalo desde su link, gracias !!