El martes a la mañana se puso a disposición de la investigación de la Fiscalía 2 el sujeto de 18 años registrado por las cámaras de seguridad del comercio de San Nicolás 821.

La amplia difusión de las imágenes que difundió el dueño de Corchos para dar con los dos delincuentes que sustrajeron la recaudación del sistema de cobro de impuestos y servicios el viernes pasado tuvo un buen resultado: se entregaron los dos sospechosos.

Los sujetos registrados por las cámaras de seguridad y reconocidos por los investigadores de las Fiscalías 3 y 2, de los fiscales Nelson Mastorchio y Francisco Furnari respectivamente están detenidos y sometidos a un proceso judicial por el delito de robo.

El martes a la mañana se entregó José Belbey, el sujeto de 18 años, por quien el fiscal Furnari pidió su detención en un allanamiento en calle Monroe que dio negativo porque se ocultó al verse en todas las redes sociales y medios de comunicación de la ciudad.

Al igual que su consorte de causa, Marcelo Coronel, en las primeras horas de la mañana se presentó con el aboado defensor, Tomás Martínez White, en el segundo piso de la Fiscalía.

Desde la Fiscalía 2 ordenaron que un efectivo policial procediera al arresto y lo mantuviera arrestado mientras prepararon la declaración indagatoria en el marco del artículo 308 del Código Penal.

A diferencia de su cómplice ante el fiscal Furnari y su equipo de instructores judiciales Belbey se negó a declarar amparado en el derecho constitucional que permite la posibilidad de no declarar contra si mismo.

Coronel, por el contrario, declaró y negó haber participado del robo y que el hombre filmado por las cámaras de seguridad perpetrando el robo contra el cajero no es él; tal como trascendió de fuentes judiciales.

A los investigadores judiciales les dijo que en el horario del atraco estuvo en otro lugar y nombró las distintas personas que compartieron con él los distintos momentos de la jornada del viernes desde las últimas horas de la tarde hasta las primeras de la noche.

Para los encargados de la instrucción judicial se trata de falsas coartadas que deben contrastar con la evacuación de citas a las diferentes personas mencionadas; quienes deben declarar bajo juramento de decir verdad si compartieron la jornada con el imputado.

El gran misterio: ¿Dónde está el dinero?

El interrogante mayor para los investigadores y el comerciante damnificado es saber ¿Dónde está el dinero sustraído? Porque en los distintos allanamientos desarrollados el fin de semana y el lunes no ha sido encontrado y los sospechosos han negado tenerlo al mostrarse ajenos al episodio.

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