Malena Salomé Iglesias, de 23 años, es la primera oficial travesti de la Policía Bonaerense y, si bien se desempeñó en políticas de género, ahora participa de operativos en La Plata en los que requisa a chicas trans sospechadas de venta de estupefacientes.

Sin que nadie le regale nada, logró ganarse un lugar dentro de  la fuerza policial, una institución muy cerrada y con pensamientos arcaicos. A pesar de tener el aval de los superiores y una buena relación con sus compañeros de la cotidianeidad, en gran parte de los uniformados existe un rechazo que se expresó en las redes sociales, durante los últimos días.

Malena inició una relación sentimental con Cristian Lo Giudice, un efectivo de Infantería que conoció durante el Operativo Sol. Al publicar fotos en Facebook besándose con el uniforme puesto, varios colegas expresaron su repudio en las redes sociales, argumentando que no respetan los lineamientos de la institución.

Ella se inscribió en 2015 en la Escuela de Suboficiales de la Policía bonaerense y luego trabajó en la Comisaría de la Mujer de Huanguelén. Convocada al Operativo Sol 2016, le asignaron Punta Mogotes, en Playa Grande, de Mar del Plata, donde permaneció hasta el 3 de marzo. «Ese día volví a mi localidad, presenté el pedido de traslado y al mes me notificaron del traslado a La Plata», dijo.

Tiempo atrás, Malena fue la protagonista de un procedimiento muy particular en la «zona roja» de esa ciudad, donde policías de la Novena desplegaron en la calle un biombo que ellos mismos hicieron con madera terciada, para requisar a resguardo de miradas indiscretas a las sospechosas de comercializar estupefacientes: “No por ser travesti hay que vender drogas», sentenció, explicando que existen otras oportunidades.

Fuente: Agencia Nova