La cartera sanitaria recomienda beber mucha agua durante todo el día, comer alimentos frescos (como frutas y verduras), vestir ropa suelta y clara, prestar atención al estado de ingesta de líquidos y al ánimo de los bebés y los adultos mayores.

Además, se aconseja evitar las bebidas alcohólicas muy dulces  y las infusiones calientes, y protegerse del sol con sombreros o sombrillas.

El SMN también recuerda proteger a los niños en lugares con sombra y ventilados y dar el pecho con más frecuencia a los lactantes.

«El nivel amarillo se alcanza cuando se superan los umbrales en las temperaturas máximas y mínimas observadas en cada ciudad, como así también en los pronósticos a 24-48 horas. Los umbrales mencionados fueron definidos de acuerdo a su relación con la mortalidad diaria», explican desde el SMN. En esta etapa el riesgo de mortalidad es «leve a moderado» y se advierte que el calor «puede ser peligroso, especialmente para los bebes y niños pequeños, personas mayores de 65 años o aquellos con enfermedades crónicas».

La alerta amarilla es el segundo nivel en el sistema de clasificación de olas de calor del Servicio Meteorológico, de acuerdo con su incidencia en la salud de las personas.

El nivel más bajo es el de alerta verde, cuando el calor no llega a producir efectos sobre la salud.

Por encima de la alerta amarilla está la alerta naranja (riesgo de mortalidad «moderado a alto»), cuando se prevé que la ola de calor se extienda en el tiempo durante más de 48 horas, aumentando así el exceso de temperatura.

Y el nivel más alto es la alerta roja (riesgo de mortalidad «alto extremo»), dentro de una ola de calor extensa y «con pronósticos de temperaturas que evidencian la continuidad de la misma». Estos casos excepcionales pueden afectar a todas las personas saludables, y no sólo a los grupos de riesgo.

La ola de calor abarca a todo el país con máximas de 42 grados para San Luis, 40 para La Rioja y Santiago del Estero, y 39 en Formosa, Resistencia, Tucumán y Mendoza, de acuerdo al informe del SMN.