Nacionales-Estuvo cinco años prófugo y fue detenido cuando intentó conocer a su nieto
Se trata del ex comisario de la Bonaerense Héctor Amarilla, quien en 2013 ejecutó a un adolescente que se robó una camiseta de fútbol.
Un ex comisario de la policía bonaerense prófugo desde 2014 por un caso de «gatillo fácil», fue detenido en Rafael Calzada cuando volvió al país desde Paraguay para conocer a su nieto recién nacido. El hombre era buscado por el asesinato de un joven de 18 años, que fue ejecutado de un balazo en el cuello cuando intentó robar una camiseta de fútbol.
Se trata de Héctor Alejandro Amarilla (57), quien figuraba en la lista de personas más buscadas. El del Ministerio de Seguridad de la Nación ofrecía una recompensa de 500.000 pesos para quien aportara datos que posibilitaran su arresto.
Amarilla fue atrapado el domingo en una casa sobre la calle San Martín al 4500, de esa localidad del partido bonaerense de Almirante Brown. Al lugar llegaron efectivos del Comando Unificado de Fuerzas de Recaptura de Evadidos (Cufre) de Gendarmería Nacional, que fueron alertados que el prófugo estaba en la vivienda.
Los investigadores sabían que el ex comisario había huido a Paraguay, aunque tomaron conocimiento de que una de sus hijas tuvo un hijo y existía la posibilidad que el viniera al país a conocerlo.
Por tal motivo, se montó una vigilancia en un domicilio, en el que finalmente los gendarmes irrumpieron cuando vieron a la mujer y la hija de Amarilla arribar al lugar.
El ex comisario quedó ahora a disposición del fiscal Kazewski para ser indagado en las próximas horas.
El crimen por el que imputan al ex comisario
El hecho ocurrió el 25 de septiembre de 2013 en 9 de Julio y Oncativo, de Lanús, cuando Vázquez (18) quiso robar una camiseta de fútbol de un local y, de acuerdo a la pesquisa, Amarilla -que estaba trabajando allí como empleado de seguridad- lo corrió y lo mató de un tiro en el cuello.
Según se determinó en la investigación, el joven se había probado varias camisetas y se retiró del local con una de ellas puesta, sin pagar.
En ese momento, Amarilla era el jefe de la comisaría 2 de Lanús. Tras asesinar a Vázquez, el ex policía se disparó en la pierna para simular que había mantenido un tiroteo con el joven al que había matado.
El ex comisario quedó hora a disposición del fiscal 8 de Lomas de Zamora Nicolás Kazewski, a cargo de la investigación. El funcionario judicial que ordenó su captura nacional e internacional lo acusó de «homicidio doblemente agravado por alevosía y por su condición de funcionario policial».