El juez Carlos Picco, como subrogante del Juzgado Correccional 2, absolvió a una profesional de la guardia del Hospital «San José», llevada a juicio oral en un caso por supuesta mala praxis profesional al fallecer un bebé de quince meses.

Una profesional de la salud fue absuelta en un fallo de primera instancia, dictado en un proceso penal seguido por supuesta mala praxis profesional en el marco de su actuación como médica de guardia pediátrica de nuestro hospital zonal.

Carlos Picco, como juez subrogante del Juzgado Correccional 2, absolvió a la imputada por entender que luego de hacer una profunda valoración de las pruebas documentales, periciales e instrumentales, así como de las declaraciones testimoniales producidas en el curso del debate, no puede concluir que la actuación médica llevada a cabo por la pediatra haya sido negligente y apartada de las exigencias que la emergencia le requería conforme a los postulados del arte médico, ni que esa conducta fuera la generadora del lamentable fallecimiento del paciente, ocurrido aproximadamente treinta y seis horas después de dicha actuación profesional.

La acusación estuvo a cargo del fiscal Nelson Mastorchio, quien sostuvo que los padres llevaron al niño, de 15 meses, al centro de salud en dos oportunidades el domingo 27 a las 16:30 y el lunes 28 de diciembre de 2015 a las 2:30 con un cuadro de gastroenteritis aguda (GEA); y que el niño gozaba de buena salud y además de tener todas las vacunas cumplía con los controles pediátricos periódicos.

Para el fiscal Nelson Mastorchio, por las declaraciones de los padres y por la pericia médica oficial, estaba acreditada la responsabilidad de la imputada en la muerte del paciente. El reproche de la acusación fue que la imputada abusó del ojo clínico para mandar a los padres con el niño de regreso a la casa, sin someterlo a estudios de diagnóstico o a un tratamiento más profundo. Eso generó un agravamiento del cuadro que terminó de la peor manera con la muerte del pequeño el martes 29 de diciembre a las 15:00. En este sentido la fiscalía pidió una condena a dos años de prisión en suspenso por el delito penal de homicidio culposo.

Por su parte, el juez argumentó en su sentencia que los elementos de prueba no le permitieron establecer con certeza la responsabilidad penal de la médica en la muerte del paciente; que hubo contradicciones entre los dichos brindados por los padres del menor y los dichos brindados por la imputada en el debate y los indicios que surgen de las testimoniales prestadas por los profesionales médicos durante el debate; y que la pericia médica oficial es insuficiente para arribar a una conclusión certera, pues surge de la misma una conclusión por lo menos antojadiza y apresurada, además de autocontradictoria. Motivos por los cuales, dictó veredicto absolutorio a favor de la imputada.

El fiscal Nelson Mastorchio ya pidió reserva de apelar el fallo en primera instancia por considerar que existen elementos que acreditan la responsabilidad de la médica.

Fuente: Semanario del Tiempo