Receta saludable – Budín de algarroba: simple, rico y un gran aliado para los amantes del chocolate.

La algarroba es otro de esos ingredientes ancestrales que, gracias a su gran cantidad de propiedades, ha recuperado su importancia y su lugar dentro de la cocina. Como mayormente se consume en forma de harina (ya sea la algarroba blanca, con que los aborígenes del noroeste argentino preparan su famoso patay, o la algarroba negra, que se usa para sustituir el cacao), muchas personas desconocen que las algarrobas son legumbres. De ahí su increíble aporte nutricional.

La algarroba es perfecta para elaborar panes, bizcochuelos, budines y pastas. Además, con las vainas se producen bebidas tradicionales como la añapa –una especie de licor–, la aloja y el arrope. Sin dudas, se trata de un ingrediente muy versátil y sumamente recomendable.

Las algarrobas son ricas en calcio, hierro y vitaminas B2 y B6. En forma de harina, se parece al cacao pero, a diferencia de él, contiene pocas grasas y nada de cafeína. Aporta proteínas ricas en triptófano y abundantes azúcares naturales, lo que reduce la necesidad de agregar otros endulzantes.

Así que hoy te proponemos preparar un rico budín de algarroba o incorporar a tu dieta las opciones que elaboran en almacenes naturales como Las Nereidas, espacio al que agradecemos esta receta saludable de la semana.

Ingredientes

1 taza de harina integral
4 cdas. soperas de harina de algarroba
1 cda. de polvo de hornear
1 taza de azúcar
2 huevos
1/4 taza de aceite girasol
1/2 taza de agua
Nueces para decorar o para incorporar a la preparación (a gusto)

Preparación:

Colocar los productos secos en un recipiente y mezclar.

2. Agregar los huevos, el aceite y el agua. Batir (con batidor de mano) hasta que se forme una mezcla homogénea.

3. Colocar en molde (previamente enmantecado y enharinado). Llevar al horno por un mínimo de 35 minutos. Cuidar bien el tiempo de cocción; cualquier exceso provocaría que la preparación se vuelva muy seca.

4. Decorar con nueces. También podés agregar nueces picadas a la preparación.

Como verás, es bien simple la preparación y muy poca la cantidad de ingredientes necesarios. Si optaras por agregar nueces, sumarías contenido graso pero saludable, ya que estos frutos secos aportan ácidos grasos Omega 3, lo que reduce el colesterol LDL; además, favorecen el funcionamiento cerebral, fortifican los huesos y realizan una acción antioxidante.